SEIS CURIOSIDADES DEL PATÉ Y EL FOIE GRAS QUE PROBABLEMENTE NO CONOCÍAS
31 octubre, 2025
El paté, con su textura suave y su delicioso y delicado sabor, es un ingrediente versátil que ha conquistado las cocinas de todo el planeta. Elaborado tradicionalmente con hígado y carne y más recientemente, con pescados o vegetales, tiene su origen en la gastronomía francesa medieval, donde era considerado como un majar, reservado solo para las clases adineradas y la nobleza. Con el tiempo, su uso extendió más allá de Francia, adaptándose a las tradiciones culinarias de cada región. De hecho, hoy el paté no solo se disfruta como canapé, untado en pan, sino que es ingrediente fundamental de recetas y de las más sofisticadas creaciones gourmet.
Como muestra, hoy viajamos por diferentes países, donde descubriremos cómo se integra este producto en sus cocinas y sus más deliciosas elaboraciones.
1. Francia: la cuna del paté
Hablar del paté sin detenernos en Francia es misión imposible. El paté de campagne y el foie gras son pilares fundamentales de la gastronomía de este país. Tradicionalmente elaborados con hígado de cerdo, de pato o de oca, hierbas y en ocasiones, un toque de licor, los patés franceses son símbolo de refinamiento y tradición. Como ejemplo hoy os proponemos una deliciosa receta:
Vol-au-vent relleno de paté
Para elaborarla necesitaremos 1 lámina de hojaldre; 200 g de parte de foie o paté de ave; 1 chalota picada, 1 cucharada de mantequilla; 1 chorrito de coñac o vino blanco; sal y pimienta al gusto y un poco de perejil picado.
Elaboración:
1. Cortamos en círculos masa de hojaldre y horneamos hasta que estén dorados y crujientes.
2. En una sartén, salteamos la chalota con mantequilla, añadimos el paté y el coñac. Cocinamos unos minutos hasta que se forme un mezcla cremosa.
3. Rellenamos los vol-ou-vent con esta mezcla y espolvoreamos con perejil fresco.
4. Servimos cliente como aperitivo o entrada.
El contraste entre el crujiente y ligero hojaldre y el untuoso paté, es la combinación elegante y deliciosa que caracteriza a los tradicionales bistrot parisinos.
2. Italia: el arte del crostini
Los tradicionales costrini italianos tienen en el paté el más selecto ingrediente para sus deliciosas combinaciones. Se trata de pequeñas tostadas a las que se le añaden fiambres u otros productos y se sirven como antipasti. En la Toscana, es muy común encontrar el “crostino toscano”, elaborado con un paté de hígado de pollo, alcaparras y anchoas. Una mezcla rústica pero llena de carácter.
Costrini con paté y tomate seco
Para elaborar este aperitivo, tan simple como sabroso, necesitaremos pan rústico en rebanadas; 150 g de paté (de hígado de pollo o de cerdo); 6 tomates secos en aceite; aceite de oliva virgen extra (AOVE), hojas de albahaca fresca y pimienta recién molida.
Elaboración:
1. Tostamos las rebanadas de pan hasta que estén crujientes.
2. Untamos una generosa capa de paté sobre cada tostada.
3. Colocamos encima un trozo de tomate seco y unas hojas de albahaca.
4. Rociamos con un hilo de AOVE y un toque de pimienta.
5. Servimos templado.
3. Alemania: sabores contundentes y contrastes audaces
En Alemania el paté (Leberwurst o Kalbsleberpastete) se degusta generalmente sobre un pan integral o de centeno, acompañado de pepinillos encurtidos, cebolla y mostaza. Es un clásico de los desayunos y meriendas, especialmente en la región de Baviera.
Tostadas alemanas con pepinillos y paté
Este bocado, lleno de energía y carácter, es el resultado de una perfecta combinación ente la cremosidad del paté, la acidez de los pepinillos y el toque picante de la mostaza. Para elaborarlo necesitaremos pan de centeno o integral; 10 g de paté de cerdo o de hígado; 4 pepinillos agridulces en rodajas; mostaza tipo Dijon o bávara y cebolla morada en aros finos.
Elaboración:
1. Cortamos el pan en rebanadas y lo tostamos ligeramente.
2. Untamos con una fina capa de mostaza.
3. Añadimos una porción de paté y lo extendemos de manera uniforme.
4. Decoramos con las rodajas de pepinillo y cebolla morada.
5. Servimos templado o frío.
4. Reino Unido: el potted meat y la tradición británica
En el Reino Unido el paté se elabora cocinando carne o hígado con especias y se conserva en grasa. Tradicionalmente se sirve con pan tostado y chutneys. El contraste entre el sabor intenso del paté británico y la dulzura espaciada del chutney, dan como resultado un bocado a caballo entre lo clásico y lo exótico.
Potted paté con chutney de mango
Para elaborar esta sencillísima y sabrosa receta necesitaremos 200 g de paté de hígado de pollo; 2 cucharadas de mantequilla derretida; 1 cucharadita de tomillo seco; chutney de mango y pan de molde tostado.
Elaboración:
1. Mezclamos el paté con la mantequilla y el tomillo.
2. Colocamos en pequeños frascos o cuencos y cubrimos con una fina capa de mantequilla para sellar.
3. Refrigeramos al menos dos horas antes de servir.
4. Servimos en el mismo frasco o cuenco, junto con el chutney de mango y tostadas, para que cada comensal unte la cantidad que considere.
5. Japón: fusión modera
Aunque el paté no es un producto tradicional japonés, su uso se ha extendido en su cocina contemporánea. En restaurantes fusión, es común encontrar sushi rolls o gunkan maki, que incorporan el paté o el foie gras, en una perfecta combinación de técnicas orientales e ingredientes europeos.
Si te atreves a innovar, te proponemos que elabores un nigiri de arroz con una fina lámina de foie gras y un toque de salsa de soja dulce. Una fusión elegante y exquisita que te sorprenderá.
6. España: el ingrediente perfecto para una buena tapa
La cocina española ha incorporado el paté a la tradicional cultura de las tapas y los pinchos. Ya sea en canapés con anchoas, o mermeladas, en hojaldres rellenos o como base de salsas, este producto aporta textura, sabor y un toque elegante a cualquiera de nuestras recetas.
Nosotros te proponemos que pruebes a hacer mini tostas de paté (cualquiera de las variedades de La Cuina quedará perfecta), a las que añadirás una rodaja de manzana caramelizada y una gota de reducción de vino tinto. Toda una explosión de sabor dulce, salado y ácido, en un solo bocado.
Como ves, el paté es mucho más que una simple crema untable, es un ingrediente que traspasa fronteras y culturas y que tiene una capacidad única para adaptarse a diferentes estilos y tradiciones culinarias. Un poco de imaginación es lo único que necesitas para elaborar una original y deliciosa receta.
