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Llévate un tupper a la oficina: ahorrarás tiempo, dinero y ganarás en salud

Si algo tenemos claro en esta vuelta a la rutina es que vamos a tener que “apretarnos el cinturón” y recuperar nuestros hábitos de vida y comida saludable, si queremos “sobrevivir” a este otoño. Hacer realidad estas dos auténticas necesidades puede ser un poquito más fácil si sigues nuestro consejo de hoy: olvídate de comer en restaurantes de comida rápida o de dejarte media nómina en comidas fuera de la oficina y llévate un tupper al trabajo. Tu bolsillo y tu salud te lo agradecerán. Preparar comidas sanas, sabrosas y ligeras no es tan complicado y en este post estamos dispuestos a demostrártelo con algunas recetas fáciles y rápidas, que puedes preparar con antelación y disfrutarlas como recién cocinadas en tu oficina.

Ensalada de legumbres

Alubias, garbanzos, lentejas… la legumbre que más te guste es perfecta para preparar una deliciosa ensalada, super completa y nutritiva. Si no tienes tiempo de cocer las legumbres cómpralas ya cocidas. Solo tendrás que escurrirlas y lavarlas. Las pones directamente en el tupper en el que las vayas a transportar y añades tomate cortado a cuadraditos, cebolla finamente cortada, pimiento verde y rojo cortado en daditos y una lata de atún en aceite de oliva. Lo mezclas todo bien, salpimientas y añades un chorrito de vinagre y una cucharada de aceite de oliva virgen extra (antes de añadir el aceite prueba la ensalada por si fuera suficiente el aceite del atún). Y si eres vegano esta ensalada también queda deliciosa prescindiendo del atún y añadiendo taquitos de tofu, maíz o cualquier otro vegetal que te guste.

Curry de garbanzos

Otra receta ligera, sana, deliciosa y muy fácil de preparar. Como el tiempo apremia, volveremos a utilizar garbanzos de tarro de cristal. Mientras escurren, pochamos cebolla hasta que quede transparente. A continuación añadimos piña cortada en daditos pequeños y un pimiento rojo muy picado y cuando estén blanditos regamos con medio litro de leche de coco. Vertemos los garbanzos y sazonamos al gusto con cúrcuma, curry y un poco de jengibre. Dejamos cocer hasta que la salsa espese un poco, rectificamos de sal y retiramos del fuego hasta que se enfríe. Si quieres que esta receta sea más completa, puedes incorporar huevo duro picado y acompañarla de arroz blanco o quinoa.

Ensalada de quinoa, calabacín y atún

Para esta receta herviremos 100 gramos de quinoa (si quieres ahorrar tiempo y dinero también puedes utilizar 2 vasitos de quinoa de microondas). Mientras se cocina la quinoa, con un pelapatatas cortamos medio calabacín en tiras, como si fueran tallarines. Dejamos enfriar la quinoa y le añadimos una lata de atún en aceite de oliva virgen extra (con salmón ahumado también resulta perfecta), queso feta en cuadraditos, tomates cherry y aceitunas negras. Incorporamos el calabacín y aliñamos con una vinagreta de limón, una cucharadita de mostaza, aceite de oliva virgen extra, curry, sal y pimienta.

Ensalada César en tarro

Puedes preparar esta receta con pechuga de pollo a la plancha o con pollo rebozado aunque, si de comida saludable estamos hablando, siempre será más aconsejable la primera opción. La vamos a transportar en un tarro grande de cristal en el que lo primero que introduciremos será la salsa, para mezclarla solo en el momento de comer y que la lechuga permanezca fresca y crujiente. Por tanto, lo primero que debemos preparar es el pollo para que se enfríe antes de montar la ensalada en el bote. Después prepararemos la salsa. Para ello, ponemos un huevo en un vaso de batidora, 100 ml de aceite de girasol, 100 g de queso parmesano, 1/2 ajo, dos anchoas, sal y pimienta. Batimos bien hasta que quede una salsa homogénea. A continuación, disponemos la salsa en en fondo del tarro. Sobre ella agregamos el pollo y sobre éste las hojas de lechuga (nosotros optamos por brotes verdes). Si te gustan los crutones de pan pero no quieres añadir demasiadas calorías a tu preparación, te recomendamos que cortes el pan en cuadraditos y en lugar de freírlo lo tuestes en el horno. Los crutones se añadirían en la última capa de nuestro tarro. A la hora de comer la ensalada, la verteremos en un plato y mezclaremos bien para que la salsa quede integrada.

Quiche de Alcachofas

Para esta preparación disponemos una plancha de masa de hojaldre en en molde circular. Precalienta el horno a 180. Por otra parte, lleva a un cuenco 200 ml de nata 60% para cocinar, 250 g de queso light, dos huevos y 100 g de pavo o jamón serrano troceado. Mezclas y limpias unas alcachofas. Las sofríes bien en las sartén en trozos muy pequeños (si no tienes mucho tiempo también puedes utilizar alcachofas en conserva) e incorporas a la mezcla anterior. Viertes en el molde y horneas unos 30 minutos o hasta que pinches la quiche y el cuchillo salga limpio. Este plato está delicioso frío pero si te gusta más caliente, con un minuto en el microondas de tu oficina quedará perfecto.

Tagliatelle con setas, tomate seco y almendras

Muchas veces las salsas no solo son difíciles de transportar y más pesadas sino que pueden quedar demasiado densas con el paso de las horas. Por ello, es una buenísima y sanísima idea prepara la pasta sin salsa pero, no por ello, menos apetecible. Para nuestra receta de hoy utilizaremos setas de temporada, que rehogaremos con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y ajo en polvo. Mientras se cocinan las setas cortamos el tomate en cuadraditos e incorporamos a las setas en los últimos dos minutos de cocinado. Reservamos y en la misma sartén doramos un puñado de almendras laminadas. Por otra parte, cocinemos los tagliatelle y picamos muy finamente unas hojas de albahaca. Cuando todos los ingredientes estén fríos los introducimos en un tupper, disponiendo primero la pasta y sobre ella las setas con los tomates y las almendras tostadas. La albahaca picada la guardaremos en un papel film para que no se mustie y la añadiremos en el último momento antes de servir. Justo antes de degustar esta preparación, la servimos en un plato y calentamos en el micro durante un minutos. Espolvoreamos con la albahaca y añadimos un poco de parmesano rallado.

Éstas son solo algunas ideas pero, si encuentras tus recetas preferidas y te las llevas a la oficina en un tupper, tu agenda, tu cartera y tu salud te lo agradecerán.

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